Viajar a la gran fiesta en familia (y volver)

He estado de viaje este fin de semana.  He viajado al universo Verdú Arnal. Poco a poco voy entendiendo que he nacido en una familia rumbosa, dada a las celebraciones y los encuentros. Lo he pasado muy bien sorprendiendo a mis abuelos en su gran fiesta, bailando y jugando con la yaya y los primos sin descanso. Me ha gustado ver a las hermanas de mi yaya cantando y a mis abuelos sudando la gota gorda en el pasapalabra. Luego al día siguiente el bis y volver a ver a los tíos de mi má (que venían de lejos en tren) y a mis tíos y a mis primos y a la yaya y al padrí y jugar en la playa y comer arroz y fideuá en el puerto... Me ha gustado mucho estar con mi familia, que por cierto son muchos y hablan mucho.
Solo me preocupaba no volver nunca ya a casa. Pero ya hemos vuelto. Ya hemos jugado y nos hemos abrazado mucho. Pronto iremos a un museo de nuevo, y a la piscina, y al pisito. Con papá, mamá. Emma. Ese es mi mundo, mi lugar de partida para siempre.