martes, 5 de agosto de 2014

A ca la yaya

He estado a ca la yaya 24 horas, muy cerca de ella, he comido y dormido a su lado y jugando con ella y mis primos sin parar. No me ha costado nada acostumbrarme. Eso sí, he vuelto a casa y me sentía otra, más madura y con más criterio. Y me he dado cuenta de que nada era de mi gusto, qué pesados se hacen a veces estos dos con sus costumbres, sus baños, sus paseos, sus tetas... Pero hay que ser benévolos con ellos, que no saben lo que hacen...

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Otros viajeros